Hoy te enseñaremos a realizar porcelana fría desde cero de manera fácil y rápida desde la comodidad de tu casa. De esta manera podrás iniciar en el mundo de la cerámica que tanto te gusta incluso si tienes un presupuesto bajo.
A lo largo de este blog te contaremos los beneficios y factores para tener en cuenta si deseas fabricar tu propia masa desde cero y te indicaremos cómo hacerlo. Sin más que agregar, ¡empecemos!
Contenido
¿Qué es la Porcelana Fría y para qué Sirve?
La porcelana fría es una masa artística que se usa para moldear y crear piezas personalizadas que, una vez terminadas, se pueden dejar al secado al aire libre para que se endurezcan y puedan exhibir posteriormente.
Este material es uno de los que más se usa en la actualidad para la creación de piezas de escultura y de cerámica. La principal razón de esto es la facilidad de uso de esta y que es un material que es sencillo de encontrar cerca de donde vives.
No se requiere ser un experto en artes plásticas para trabajar la porcelana, ¡incluso los niños pueden usarla! solo basta con recurrir a tutoriales en línea o cursos presenciales para conocer los pasos básicos para manejar esta pasta.
Normalmente existen utensilios y herramientas que facilitan el modelado en porcelana fría. Algunos de estos son las estecas, espátulas, moldes e incluso tus manos.
La versatilidad de este material hace que incluso puedas encontrarlo de distintos colores o, si no lo consigues, puedes pintarlo con tus temperas acrílicas preferidas gracias a su nivel de absorvimiento de color.
¿Cuál es la Diferencia entre la Porcelana Fría y la Arcilla Polimérica?
Seguramente has escuchado oír el término de arcilla polimérica cuando se está hablando de materiales para la cerámica como la porcelana fría. Sin embargo, no debes confundirlos, pues son dos elementos muy diferentes.
La diferencia que más resalta se encuentra en los materiales de cada una. Mientras que la arcilla polimérica tiene compuestos plásticos, como el PVC, el cual hace que sea resistente al agua, la porcelana fría está hecha de materiales orgánicos que no son resistentes al agua, como la fécula de maíz.
Otra diferencia importante resalta en la practicidad de su uso. La porcelana fría se caracteriza por ser un material moldeable y fácil de usar. La arcilla polimérica, por su parte, no resulta tan suave para manejar.
Pero no te dejes llevar por estos aspectos solamente al momento de elegir entre uno de estos materiales para manejar. Antes de ello, debes pensar bien cual es tu propósito. ¿Quieres realizar manualidades con niños? ¿Quieres una pieza que sea resistente y duradera? ¿o simplemente buscas un hobby para tus ratos libres?
Estos son algunos aspectos que te aconsejamos tengas en cuenta para elegir tu material de trabajo para tus artesanías. Te invitamos a evaluar bien las ventajas de cada uno y, si estás decidido a trabajar con porcelana fría pero no sabes donde conseguirla, te invitamos a seguir leyendo para enseñarte cómo hacerla por tu cuenta.
Beneficios de la Porcelana Casera
Probablemente te preguntarás: ¿cómo me beneficio al hacer mi propia porcelana fría? Así que ahora te contaremos brevemente porqué deberías hacerla y qué cosas buenas te aportará.
En primer lugar debemos comenzar nombrando uno de los factores más importantes: el presupuesto. Si bien el precio de la porcelana no es tan elevado, hay que tener en cuenta que 1 kg de este material oscila entre los 13 euros.
Ahora bien, si decides arriesgarte a hacer tu propia porcelana, conseguirás ahorrar una buena cantidad de dinero. Los materiales necesarios para hacer tu creación te saldrán mucho más económicos e incluso verás que tendrás la mayoría de estos en casa.
Como segundo aspecto, hay que resaltar el conjunto de beneficios terapéuticos que te ofrece el fabricar tu masa desde cero. Cuando eres tú quien debe crear la materia prima para tu obra artística, consigues crear un lazo más directo con ella y, por lo tanto, valorarás más el resultado final.
Por otro lado, si lo que deseas es entretener a los más pequeños, te aseguramos que esta actividad los mantendrá ocupados por mucho tiempo. Esto sin mencionar que explorarán e irán más allá de sus límites creativos y aprenderán a desarrollar sus habilidades motoras.
Cosas para Tener en Cuenta antes de Hacer Porcelana Casera
Es momento de pasar a ciertos aspectos que te mencionamos para que tengas en cuentas antes, durante y después de tomar la decisión de fabricar tu propia porcelana fría.
En primer lugar, al ser un proceso que realizarás tú de forma casera, debes tener en cuenta que el resultado final de la pasta probablemente no será como el que sueles ver de aquellas masas procesadas en las fábricas.
Es decir, no desesperes si el resultado final no es 100% parecido a la porcelana que consigues en una tienda de arte y manualidades. Siempre y cuando tu material resulte útil para lo que quieres realizar, puedes estar tranquilo de que realizaste bien el procedimiento.
Sumado a esto, recuerda que como muchos otros procesos creativos, debes darle un espacio a la imperfección. Puede que al usar materiales orgánicos, como la fécula de maíz con agua, debas intentar el proceso más de una vez hasta que te salga perfecto.
Pero no desesperes, recuerda que todo es parte del proceso. De hecho, te invitamos a ver esto como una oportunidad. ¿Y si del ensayo y error consigues crear un material para la venta que le pueda hacer competencia a aquellos traídos de las fábricas?
Por último, te recordamos que es un proceso que necesita paciencia. Entre los principales materiales que componen a la porcelana fría se encuentran la fécula de maíz y el pegamento blanco y, para conseguir una mezcla homogénea entre estos dos, debes ser constante en procesos como la mezcla para evitar que se peguen y se estropee la masa.
Tutorial para Hacer Porcelana en Casa
A continuación te nombraremos la lista de materiales necesarios para que empieces el proceso de elaboración de tu porcelana fría en casa.
Materiales
- Recipiente grande de plástico o cristal
- Olla mediana
- Pala de madera de cocina
- Cuchara de plástico
- Crema para manos de tu preferencia
- Bolsa de plástico
- 1 Kg de fécula de maíz
- 1 taza de pegamento líquido blanco
- 2 cucharadas de jugo de limón o vinagre
- 2 cucharadas de aceite para bebé
Paso a Paso para Hacer Porcelana Fría
- Vierte el aceite para bebé, el jugo de limón o vinagre y el pegamento blanco en la olla mediana.
- Con la cuchara, mezcla los ingredientes de la olla hasta que quede una masa homogénea e integrada.
- Luego, agrega cuidadosamente la fécula de maíz a tu masa y continúa mezclando hasta que se integre todo el contenido.
Una vez tengas una pasta consistente, puedes proseguir con el siguiente paso.
- Prende tu estufa a fuego medio y pon tu olla a calentar.
Durante este proceso la pasta se comenzará a poner más espesa, por eso es importante que con la pala de madera mezcles constantemente para evitar que se pegue en la olla.
Para que no te canses tanto del brazo, puedes quitar por momentos la olla del fuego y colocarla sobre una superficie plana para continuar mezclando de una manera más cómoda.
Eso sí, no lo dejes enfriar por mucho tiempo. Tan pronto te liberes un poco de la tensión en el brazo, vuelve a poner la olla en el fuego y continúa con la mezcla.
- Notarás que la pasta tomará una consistencia grumosa. Cuando llegues al punto en el que tu masa se pega a la pala de madera, puedes apagar el fuego y retirar la olla del calor.
- Ahora, mientras la pasta se enfría un poco, toma el aceite de bebé y aplícalo sobre el recipiente. Con cuidado, desplaza la masa que está en la olla hacia el tazón con el aceite. Puedes ayudarte de la pala de madera para pasar todo el producto al otro lado.
- Cuando haya enfriado un poco, toma la masa con tus manos y comienza a amasarla lentamente para darle su contextura ideal.
Un truco para saber que tu masa está lista es el siguiente: Estírala como si fueras a sacar un trozo. Si te queda una punta filosa, como en forma de pico, significa que tu pasta está en el punto exacto.
- Continúa amasando hasta que enfríe por completo tu masa. Una vez esto suceda, toma tu bolsa plástica y vertele un poco de crema en su interior. Esto evitará que se pegue la mezcla.
- Moldea tu porcelana en forma de bola y guárdala en tu bolsa plástica. Sella bien sin dejar que le entre aire o esto podría afectar más adelante cuando la quieras usar.
- Finalmente, guarda tu porcelana en el refrigerador y déjala allí por toda una noche. ¡Podrás usar tu masa al otro día!
Consejos para Cuidar tu Porcelana Fría Casera
Ahora que ya sabes cómo hacer tu propia porcelana fría, te daremos algunos consejos para que tu masa te pueda durar más.
Te recomendamos dejar tu masa almacenada en un lugar fresco. Puedes optar por el refrigerador o un lugar de tu casa donde no entre tanto el sol o la humedad. Estos factores pueden hacer que tu masa se estropee más rápidamente.
Debes tener mucho cuidado cuando regreses la porcelana a la bolsa plástica luego de haberla usado. Si guardas la porcelana y la bolsa no está bien sellada, esta se secará y se echará a perder. Puedes comprar una bolsa para guardar alimentos que tiene un dispositivo sellante en su parte superior para hacer esto más fácil.
No sobra mencionar que, como cualquier porcelana, tu producto está propenso a secarse y endurecerse en un corto periodo de tiempo.
Por ello, tendrás que realizar el procedimiento casero más de una vez si es que deseas trabajar constantemente con este material. Esto te beneficiará, pues contarás en cada proceso con una mezcla fresca y moldeable.
¿Cómo Hacer Porcelana de Colores en Casa?
Ahora que tienes tu porcelana lista para iniciar a hacer sorprendentes manualidades, de seguro te interesa saber cómo agregarles color. A continuación te contaremos cómo puedes hacerlo de una forma muy sencilla.
Materiales
- Pintura acrílica de colores
- Papel film transparente
- Guantes de latex
Paso a Paso para Hacer Porcelana de Colores
- Una vez hayas realizado el tutorial y tu masa esté lista para usar, vas a tomar la porción de esta que quieres que tenga color y la vas a separar sobre una superficie que se pueda manchar.
- Ponte tus guantes de látex para evitar terminar con manchas de pintura por todos lados. Ahora selecciona la pintura acrílica de tu preferencia.
Para obtener los mejores resultados te recomendamos comprar pintura acrílica de buena calidad. Esto hará que el color de tus piezas resalte y no se opaque con el tiempo.
- Aplica una cantidad generosa de pintura en el medio de tu porcelana y comienza a mezclarla para que el color y la masa se incorporen de la manera más homogénea posible. Realiza este procedimiento hasta que veas que toda la pasta está cubierta por el color deseado.
Si deseas que el color sea más fuerte o más claro, puedes comenzar a jugar con otros tonos complementarios como el blanco para cambiar el tono hasta que quede el de tu preferencia.
- Cuando termines de pintar tus trozos de porcelana, envuelve cada uno de estos en papel film transparente de cocina. Esto nos permitirá que se conserve bien.
Por último, tal como hiciste con la porcelana sin color, déjala almacenada en un sitio fresco para que la puedas usar siempre cuando desees en la posteridad.
Cierre
Hasta aquí llegamos con este blog tan interesante sobre la porcelana fría y cómo hacerla. Esperamos que haya sido de tu agrado. ¡Nos vemos en un próximo blog!