Existe una herramienta de la cual el arte de la cerámica depende un montón. Esta herramienta es lo que conocemos como un horno para cerámica. Hoy en día existen varios tipos de hornos para todo tipo de alfarero y arcilla.
Sabemos que elegir un horno no es fácil, incluso alguien con experiencia en el campo tiene dudas. Pero ¡afuera esas preocupaciones! Hoy te ayudaremos a que esa decisión sea fácil de tomar.
En este artículo no solo conocerás los tipos de hornos que existen, también sabrás un poco del origen de esta herramienta y para que no pienses en irte, te daremos consejos y recomendaciones que debes de tener en cuenta antes de tomar esta importante decisión.
Contenido
¿Qué es un horno para cerámica?
Según la Real Academia Española (RAE) un horno para cerámica, o también conocido como horno de alfarería, es un “aparato que sirve para trabajar y transformar con ayuda del calor las sustancias minerales”.
En otras palabras, un horno de alfarería es una herramienta que cualquier ceramista necesita para poder darle una forma dura a las figuras que vaya a realizar en barro.
Breve historia del horno para cerámica
Antes de conocerse o fabricarse el horno, nuestros antepasados realizaban sus piezas en barro y la forma en la que estas eran cocidas consistía en ponerlas alrededor del fuego sobre el suelo.
Después de esto se procedió a poner los objetos en un hoyo al cual se le construyeron tipos de paredes en paja y barro. Cuando se dieron cuenta de que esto daba mejores resultados, aproximadamente hacia el año 4000 antes de Cristo se construyeron paredes mucho más altas hechas en piedra y alrededor colocaban arena como fuente de calor y resistencia.
En China y Japón también se excavaron huecos en el suelo y luego se rodeaban con paredes hechas en piedra y arena, su interior era lo suficiente grande como para que una persona entrara gateando a poner los objetos hechos en barro. ¿Te lo imaginas?
Luego de un tiempo este horno evolucionó, y pasó de estar enterrado a estar sobre la tierra. Después en el año 400 después de Cristo nació el horno de tubo coreano. Este era llamado así ya que su fuente de calor se daba a través de un tubo, por este tuvo pasaba el calor que se esparcía al interior del horno, y para darle más aire, el horno contaba con agujeros en el techo. Otra cosa importante que pasó aquí fue que se comenzaron a usar las primeras parrillas.
Para el siglo X en Medio Oriente, se mejoraron estos hornos para hacerle competencia a los productos hechos en China. En este punto nace lo que conocemos como chimeneas, de buen tamaño y gracias a que era un lugar encerrado, los resultados fueron mejorando.
Durante los años 1708 y 1720, en Europa se renueva el horno y se comienza a usar el carbón como combustible y las parrillas se fabrican en hierro fundido para mejorar su resistencia. El horno que nació allí fue llamado horno botella el cual hacía que las llamas se fueran de las paredes hacia el centro y permitió darles mejor cocción a las piezas.
En 1858 se crearon los hornos continuos,los cuales eran curvos o rectos y estaban diseñados con el objetivo de conservar el calor y la temperatura dentro de ellos. Estos al principio tuvieron problemas pues no servían para vidriados ya que no los secaban del todo. recordemos que el vidriado es una técnica en la cerámica en la cual se cubren las piezas con barniz para que tenga un acabado claro, liso y brillante.
Por esta razón, más tarde en el siglo XX, se empezaron a usar combustibles líquidos y gaseosos que solucionaron este problema.
Finalmente, en el año 1900 se crea el primer horno de ensayo, el cual es actualmente muy usado por los alfareros para hacer cerámica.
Tipos de hornos para cerámica
Ya conociste la historia y evolución de esta herramienta, es hora de hablar de los tipos de hornos que existen en la actualidad. ¡Comencemos!
Horno de ensayo o laboratorio
Los hornos de ensayo o laboratorio son llamados así porque se usan para hacer pruebas de cocción de cualquier tipo de arcilla. Además, también es usado para comprobar la temperatura a la que cierta pieza debe exponerse.
Este tipo de horno utiliza el gas como combustible y pueden alcanzar temperaturas de 1200 a 1300 ºC.
Existen varios tipos de hornos de laboratorio, conozcámoslos:
Horno de convección por gravedad
Este horno transporta el calor por diferentes zonas y a diferentes temperaturas. Normalmente, se demora entre 45 minutos y una hora para estabilizarse a una temperatura fija.
El horno de convección por gravedad se utiliza principalmente para secar materiales que sean resistentes a altas temperaturas, como la porcelana.
Horno de convección forzada
Al igual que el horno de convección por gravedad, el horno de convección forzada también puede transportar el calor entre diferentes zonas con diferentes temperaturas. La diferencia es que este se demora entre 25 a 40 minutos para estabilizarse.
Este horno se utiliza para secar y deshidratar sustancias que necesitan ser expuestas a temperaturas rigurosas y que no se deben sobrepasar pues son piezas muy delicadas.
Horno de flujo horizontal
Su nombre se debe a que el flujo de calor que transmite lo hace en sentido horizontal. Su tiempo de estabilización a una temperatura fija se encuentra entre 25 y 40 minutos.
Este horno se utiliza para secar todo tipo de materiales y arcillas.
Horno de chorro de aire o esterilizador
Llamado así ya que el flujo de calor que produce se transporta como un chorro de aire hacia el centro del horno. Se calcula que se toma un tiempo de 15 a 20 minutos para estabilizarse a una sola temperatura.
Este horno logra alcanzar una temperatura de 220 ºC. El horno de chorro es usado para la esterilización de materiales inoxidables y de vidrio.
Horno de vacío
El horno de vacío tarda de 20 a 35 minutos para estabilizarse a una sola temperatura. Y puede alcanzar una temperatura de 200 ºC.
Este horno se utiliza para secado, cocción y curado de diferentes tipos de arcillas.
Horno anular
Este horno fue inventado en el año 1838 con el propósito de hacer ladrillos u objetos en arcilla como la vajilla. Este horno se caracteriza por su diseño original circular, ya que el objeto que se introduce se mueve en círculos alrededor del fuego que se encuentra quieto.
Este tipo de horno cuenta con 12 cámaras por las cuales el objeto va pasando a medida que va avanzando su cocción. Cada cámara tiene temperaturas distintas lo que permite controlar la cocción perfecta del objeto.
Hoy en día también podemos encontrar hornos anulares alargados y rectos, en donde el proceso del flujo de calor es el mismo. Este tipo de horno actualmente tiene una ventaja y es que consume menos energía y la ahorra ya que usa como combustible el gas natural.
Sin embargo, estos hornos ya no se usan mucho ya que existen muchas otras opciones más fáciles de manejar y pequeños, como lo son los hornos eléctricos de los que hablaremos más adelante.
Horno de túnel
El horno de túnel se caracteriza porque el fuego se mueve alrededor del objeto que se encuentra sometido al calor.
La manera en la que este tipo de horno funciona es curiosa, pues dentro de este existe un mecanismo similar a los carriles de un tren y por este es que el fuego viaja. Algo a destacar es que el fuego en cada cámara se intensifica o disminuye dependiendo de qué tanta potencia o temperatura necesita el objeto a cocer.
Los hornos de túnel se utilizan principalmente para la cocción de la porcelana. Y usa como combustible el gas, el petróleo o la electricidad.
Horno de mufla
Este horno se caracteriza por su forma simple y alargada, consta de una puerta la cual permite el acceso al interior del horno para colocar la pieza a cocer. Además, cuenta con un orificio que permite que el alfarero pueda observar todo el proceso de cocción.
La forma en la que este horno funciona es la siguiente: El gas se transporta desde la parte de abajo del horno hasta el centro que es en donde se ubica el objeto para que se cueza. En la parte de arriba cuenta con un hueco por el cual salen los gases que arroja el horno durante su funcionamiento.
Este horno se usa para la cocción de arcilla de porcelana y gres, también permite la cocción de pinturas y esmaltes con las que fueron pintadas. Este horno usa como combustible el gas natural o propano.
Horno de cámara
Este tipo de horno lo podemos encontrar en dos formas, circular y cuadrado. Pero sin importar sus formas, las funciones siguen siendo las mismas.
Este horno puede tener hasta tres pisos, en donde cada piso se dedica a la cocción de diferentes tipos de masas a diferentes temperaturas. El horno de tres pisos es utilizado para cocer porcelana. El horno de dos pisos habitualmente se usa para la cocción de una cerámica con acabado vidrioso.
El flujo de calor se da de manera vertical, de abajo hacia arriba. Para este tipo de horno utilizan el carbón, el aceite o el gas como combustible. Una vez el calor llega arriba, se concentra aquí y cuece el objeto en barro. El horno de cámara también cuenta con una abertura en la parte superior que permite que los gases salgan.
Otro dato que debes saber sobre el horno de cámara es que puede alcanzar temperaturas de hasta 1100 ºC.
Horno kasseler
Este horno es antiguo y se usa para la cocción de tejas y objetos de alfarería como la vajilla.
Su estructura consiste en un espacio alargado en su interior, es por esto que el calor se transporta de manera horizontal. El calor viaja desde la parte inferior derecha hasta el centro que es en donde se ubica la pieza a cocer, finalmente, por el agujero ubicado en la parte superior izquierda arroja los gases y la da más oxígeno al objeto que se encuentra dentro de él.
Horno eléctrico
Los hornos eléctricos son de los más usados actualmente en la cerámica, esto se debe a que es muy cómodo trabajar con ellos.
Dentro de estos hornos, se encuentran ubicadas en las paredes unas vías por las cuales se transporta el calor y permite conservar fácilmente las temperaturas que se quieran alcanzar.
Otra ventaja que tienen estos hornos es que pueden alcanzar temperaturas mayores a 1450 ºC, lo que significa que el ceramista puede cocer todo tipo de arcilla y a la temperatura que desee. Normalmente estos hornos miden de 1 metro a 2 metros de alto.
Pero, no todo es color de rosa, estos hornos también hay que saberlos manejar y tener en cuenta la temperatura a la que debe ser expuesta la pieza en barro, de no ser así se puede quemar y dañar.
Gracias a los avances tecnológicos, en la actualidad podemos encontrar hornos eléctricos pequeños los cuales son más livianos y fáciles de manejar y de mover. Genial, ¿cierto?
Horno de gas
Los hornos de gas también son muy usados por los alfareros ya que son fáciles de usar.
Este tipo de horno es similar al horno eléctrico, su gran diferencia es que para que este funcione en vez de ir conectado a una corriente eléctrica, debe contar con cilindros de gas.
Dato importante: las botellas o cilindros de gas siempre deben estar ubicadas lejos del horno para mayor seguridad, no queremos accidentes.
Una ventaja de este horno por sobre todos los anteriormente nombrados es que puede alcanzar cualquier temperatura y conservarla en cuestión de minutos.
Su mayor desventaja es que son muy pesados y grandes, normalmente miden más de un metro de alto, por lo que moverlos es bastante complicado y se convierte en un problema para el alfarero que lo esté utilizando.
Aspectos a tener en cuenta antes de comprar un horno
Ya que conociste los tipos de hornos para cerámica que existen, es hora de continuar con aspectos que nunca debes olvidar antes de comprar esta herramienta tan importante para hacer cerámica.
Tamaño de las piezas
Antes de comprar un horno, debes tener en cuenta cuál es el tamaño de las piezas que vas a elaborar.
Si tus piezas van a ser pequeñas como lo son los platos y pocillos, puedes elegir un horno pequeño, pero si tus piezas van a ser de mayor tamaño es mejor que optes por comprar un horno al que le quepa la pieza que realizarás.
Sin embargo, nosotros te recomendamos que, aunque al principio solo vayas a realizar piezas pequeñas, consideres elegir un horno que te pueda servir en el futuro y puedas usarlo para hacer piezas de mayor volumen.
Precio
Los precios de los hornos varían dependiendo del tamaño y de si son a gas o eléctricos, que son los más comunes hoy en día. Debes de tener en cuenta que los precios de los hornos tanto eléctricos como a gas se encuentran entre 168 (USD) y 3656 (USD) aproximadamente.
Podrás encontrar muchas opciones y puedes elegir la que más se te acomode al bolsillo, pero siempre procura buscar productos de buena calidad pues en ocasiones herramientas como estas pueden ser de un precio asequible pero no de buena calidad. Esto implicaría más gastos para ti a mediano – largo plazo, ya que tendrías que comprar otro y eso es lo que no queremos.
Te sugerimos buscar recomendaciones y comentarios de personas que ya hayan comprado este producto o de una marca en general.
Consumo eléctrico
Sin duda alguna la mayoría de los hornos que vamos a ver en el mercado son eléctricos, por lo que antes de comprarlo debes saber que tanta energía eléctrica consumen.
Existen hornos que por su tamaño u otras características consumen mucha energía y esto termina siendo algo malo para el alfarero pues en ocasiones la red eléctrica no puede soportar ese consumo tan grande o el bolsillo ya que es un costo mayor.
Nuestro consejo es que antes de comprar un horno tengas en cuenta la cantidad de energía que este consume y si tu red doméstica puede o no soportarlo, para saber esto puedes pedirle ayuda a un electricista.
Vida útil
Si bien puedes elegir un horno que te sirva para el nivel de cerámica en el que te encuentres, es muy importante que pienses en las necesidades que puedes tener en el futuro.
No siempre te quedarás haciendo platos o pocillos, después de tanta práctica y experiencia querrás comenzar a elaborar piezas mucho más grandes como jarrones y esculturas para decoración, es este punto donde necesitarás un horno más grande.
Por eso te recomendamos que elijas un horno no tan pequeño, de esta manera no solo te ahorrarás el gasto de tener que comprar otro horno, sino que también no tendrás que volver a pasar por la difícil decisión de no saber cuál horno comprar después.
Espacio
Este es un aspecto muy importante que siempre debes de considerar antes de tomar cualquier decisión sobre la compra de un horno para cerámica.
Recuerda que los hornos pueden llegar a ocupar un gran espacio en tu lugar de trabajo, por lo que si tu espacio no es muy grande te recomendamos elegir un horno mediano para que te sirva no solo para piezas pequeñas sino también de mayor tamaño y volumen. Mientras que, si tu espacio es amplio, ¡tienes una gran ventaja! Puedes elegir el horno que más te guste y se acomode a tus necesidades.
¿Dónde comprar un horno para cerámica?
Los hornos para cerámica a gas y eléctricos son los más utilizados hoy en día por los alfareros, por lo que en el mercado podrás encontrar muchas opciones de estos dos tipos de hornos.
Estos hornos se pueden comprar en internet o en tiendas físicas que se dediquen a vender este tipo de productos para alfareros o donde vendan herramientas para aquellos que trabajan con otros materiales como el metal.
Si decides comprar un horno en una tienda física puedes tener la ventaja de observarlo detalladamente y responder todas las dudas que tengas con el asesor de ventas. Pero comprar esta herramienta de esta manera también tiene la desventaja de que puede ser más costoso.
Si por el contrario quieres comprar tu horno por internet, te aconsejamos que siempre revises que las páginas por donde vas a realizar tu compra sean seguras y te den garantía de tu producto.
En internet puedes encontrar opciones de hornos nuevos, y aquí te mostramos algunas recomendaciones:
Horno marca Tabletop Furnace Company
- Horno eléctrico.
- Sirve para la cocción de todo tipo de arcilla con esmaltado y vidriado.
- Logra alcanzar la temperatura deseada en tan solo 10 minutos.
Te recomendamos este horno porque los usuarios lo califican con 4 estrellas. Además, este horno no solo es perfecto para arcilla sino también para materiales como el metal. Para terminar, podemos decir que es fácil de usar y eficiente ya que se demora en calentar 10 minutos.
Horno SXII Serie
- Horno eléctrico.
- Cuenta con pantalla digital para elegir la temperatura a la que se va a exponer la pieza en cerámica.
- Este horno además de servir para la cocción de cerámica, acepta otros materiales como los metales y el acero.
Te recomendamos este horno porque es grande y resistente, además puedes cocer piezas de distintos materiales a la cerámica. Así podrás experimentar con todos los materiales que quieras.
Horno Cerámico Nabertherm TOP 16/R
- Horno eléctrico.
- Temperatura máxima 1300 ºC.
- Consumo 2.6 Kw (potencia eléctrica)
Te recomendamos este producto porque es uno de los últimos modelos que hay en el mercado. Este horno está diseñado para piezas pequeñas y medianas. Cuenta con pantalla en la cual se asigna la temperatura que deseamos para nuestras piezas lo que lo hace fácil de manejar y lo mejor, es liviano.
También te sugerimos que busques hornos de segunda mano, es decir, hornos usados estén en buen estado y que funcionen perfectamente. Estos tienen la ventaja de que los precios serán más bajos comparados con los precios de hornos totalmente nuevos.
Antes de despedirnos, queremos invitarte a leer nuestro blog sobre Top 7 de hornos, en el cual podrás encontrar más recomendaciones de hornos para hacer de esta decisión de compra más fácil para ti.
Llegamos al final de este artículo, pero esperamos que te hayamos ayudado a entender todos los factores que debes tener en cuenta antes de comprar un horno para cerámica y que además hayas aprendido un poco de su historia y evolución.